El gato manx debe su nombre a la isla de Man, de donde es originario. Los gatos europeos llegaron hasta allí a bordo de algunos barcos. Así se formó la primera población felina de la isla, donde nacieron cachorros sin cola. Debido al aislamiento y la endogamia, esta mutación se convirtió en un rasgo común. En este artículo hablamos sobre esta y otras muchas características del gato manx.
La raza de gato manx se caracteriza por tener una espalda corta y costados profundos. Posee una fuerte musculatura, por lo que su cuerpo es bastante compacto. Termina en una rabadilla redondeada y algo levantada, ya que sus patas traseras son más largas. Sobre ella no aparece ningún rabo, o bien, presenta una cola corta y achaparrada.
En cuanto a su cabeza, es bastante alargada pero redonda. Se debe a sus mejillas prominentes que le dan cierto aspecto “rechoncho”. Entre ellas se aprecia una nariz algo alargada y aplanada. Sus orejas se elevan sobre la cabeza y poseen un ápice redondeado. Sobresalen sus grandes ojos, circulares y de diversos colores según el individuo.
Finalmente, es de destacar que existen dos variedades según su pelo. El gato manx propiamente dicho tiene el pelo corto, denso y suave. La otra variedad posee un pelo de longitud moderada y se le conoce como gato cymric. Ambos pueden ser de colores variados.
Los gatos manx son muy activos, curiosos y juguetones. Exploran cada rincón de la casa y pueden subirse a los lugares más imposibles. Además, su gran inteligencia les permite desarrollar muchas habilidades. Pueden aprender a abrir puertas y a devolvernos la pelota. También son bastante comunicativos y emiten vocalizaciones.
Pero no todo es diversión. La raza de gatos manx también destaca por ser muy amigable y cariñosa. Forman lazos muy estrechos con su familia y no les gusta nada la soledad. También son una buena compañía para los niños, así como para otras mascotas si se les presentan de manera adecuada.
Los manx son felinos muy activos. Es muy importante que se mantengan entretenidos y estimulados. Podemos optar por multitud de juegos, tanto físicos como mentales. Las cañas de pescar y los juegos de inteligencia son una buena opción. Además, se les pueden enseñar trucos y habilidades.
Otro de los principales cuidados de la raza de gato manx es el de su pelaje. Deberá ser mayor en la variedad cymric de pelo largo, que tiene que cepillarse unas 3 veces por semana. De esta manera eliminaremos el pelo muerto y evitaremos que se traguen las temidas bolas de pelo.
Por lo demás, los cuidados del gato manx son similares a los de otras razas. Por ejemplo, deben vacunarse y desparasitarse. Sin embargo, debido a la endogamia, tienen mayor riesgo de sufrir enfermedades hereditarias. Por ello, es conveniente que un veterinario revise su salud. Si tienes o vas a adoptar un gato manx, en las Clínicas Veterinarias Mivet estaremos encantados de cuidar su salud. Busca tu clínica veterinaria más cercana en nuestra web.
Fuentes
FIF (2006). Manx. Fédération Internationale Féline. Actualizado en 01/01/2020.
TICA (2018). Manx breed. The International Cat Association. En: tica.org