El gato ragdoll es famoso por su pelo largo y sus cautivadores ojos azules. Su linaje procede de una pequeña familia de gatos californiana que fue cuidadosamente seleccionada por un grupo de criadores. Así surgieron las características del gato ragdoll actual. En este artículo repasamos las particularidades de esta raza, así como los cuidados que necesita.
El gato ragdoll es una raza de tamaño grande y fuerte presencia. Se trata de un animal musculoso, con una estructura ósea potente y una cabeza proporcionada. En esta aparece una frente curvada y unas mejillas muy desarrolladas, formando una cara redonda. Sobre ella destacan sus ojos de color azul intenso, muy grandes y ovalados.
Como ocurre en otras razas, estos gatos tienen sus patas traseras un poco más largas, levantando levemente el tren inferior del cuerpo. En él se encuentra su cola, tan larga que puede llegarle hasta los hombros. Aparece completamente tupida. Su pelaje es largo, denso y suave. Le cae por todo el cuerpo, aunque alcanza su longitud máxima en el cuello.
En cuanto a su color, el gato ragdoll presenta una coloración muy variada y compleja. Lo más común es que tengan el cuerpo pálido y ciertas partes del cuerpo oscuras. Éstas suelen ser la cara, las orejas, los pies y la cola. En la raza oficial, se permiten tres patrones de colores: colourpointed, mitted o bicolor. Las tonalidades rojas, chocolate, tostado y crema son las más comunes.
El gato ragdoll es activo cuando es joven, pero se vuelve muy calmado con la madurez. Es conocido por su personalidad tranquila, así como por permanecer tumbado durante horas. Sin embargo, no le gusta tumbarse en cualquier sitio. Este gato es muy sociable y mimoso, por lo que disfruta acurrucándose en los brazos de su familia.
Además, los gatos ragdoll son especialmente tolerantes con los niños. Su carácter alegre y bonachón es una delicia para los más pequeños. También suele llevarse bien con otras mascotas o, más bien, mostrarse indiferente ante su presencia. Por supuesto, como en cualquier raza, la personalidad es diferente en cada gato y depende de su educación.
Entre los cuidados del gato ragdoll destaca la limpieza de su pelo. Él se lame cada día, por lo que no es necesario bañarlo. Sin embargo, es muy importante cepillarlo varias veces por semana. De esta manera, eliminaremos el pelo muerto, evitando que trague bolas de pelo y, como consecuencia, que tenga problemas digestivos.
Aunque se considera una raza sana, ha sufrido una endogamia muy fuerte. Como consecuencia, tiene mayor predisposición que otros gatos a sufrir enfermedades hereditarias. Por este motivo, es muy importante que se le realicen revisiones generales de salud con frecuencia. Si tienes o vas a adoptar un gato ragdoll, busca tu clínica Mivet más cercana. En ella te esperan excelentes profesionales que cuidarán de la salud de tu felino.
Finalmente, como en todas las razas de gato, es muy importante darles una buena alimentación, así como mantenerlos vacunados y desparasitados.
Fuentes
FIF (1991). Ragdoll. Fédération Internationale Féline, actualizado el 01/01/2020.
TICA (2018). Ragdoll breed. The International Cat Association. En: tica.org