Cuando un gato nuevo llega a casa es muy difícil resistir el impulso de acariciarle y llenarle de atenciones. Sin embargo, es muy frecuente que el felino se asuste y busque un lugar en el que esconderse. En este artículo te contamos por qué ocurre y qué hacer cuando un gato nuevo en casa está asustado.
“He adoptado un gato y está asustado” es una frase recurrente tras la llegada de un felino nuevo a un hogar. Cuando esto ocurre, no debemos preocuparnos, es completamente normal, pero ¿por qué mi gato está asustado y se esconde? A los gatos les gusta mucho la rutina, por lo que puede resultarles bastante duro llegar a una casa nueva.
Es muy importante que nos pongamos en su lugar. Acaba de llegar a un sitio en el que nunca ha estado, lleno de olores nuevos, sonidos extraños y personas desconocidas. Ese gato nuevo en casa y asustado no sabe cuáles son nuestras intenciones, por lo que debemos tener paciencia y esperar a que se adapte.
Ahora que sabemos que es normal que un gato recién llegado a casa esté asustado, seguro que te preguntas cuándo vas a poder mimarlo. Cada felino ha tenido experiencias diferentes a lo largo de su vida, por lo que no todos se comportan igual.
Algunos gatos están más acostumbrados a la presencia de personas o a la inestabilidad, por lo que tardan un solo día en estar a gusto. Sin embargo, los gatos que han tenido malas experiencias o no han tenido mucho contacto con las personas pueden tardar varios días.
Lo ideal es que cuando un gato nuevo llega a casa, ya hayamos tomado una serie de medidas previas. Sin embargo, puede que esto no haya sucedido. Por ello, te dejamos algunos consejos para tranquilizar a un gato nuevo en casa asustado:
Coloca todas sus cosas (comedero, juguetes, etc.) en la habitación o rincón más tranquilo de la casa.
Añade algún objeto que proceda de su casa anterior y tenga su olor.
Proporciónale un escondite, como una caja o un transportín.
No le saques de su escondite. Espera a que salga por iniciativa propia.
Su primera comida debe ser la misma que tenía en su hogar anterior. También es recomendable la comida húmeda, ¡les encanta!
Deja que explore toda la casa poco a poco.
Cuando le veas más tranquilo, colócate cerca de él y estimula su interés con un juguete u ofreciéndole comida.
Deja que te huela y no le acaricies hasta que se frote con tu mano o tus piernas.
Si después de seguir estos consejos el gato recién llegado a casa continúa asustado, no se alimenta o no tiene un comportamiento normal, no dudes en acercarte a cualquiera de nuestras clínicas Mivet. Nuestros veterinarios expertos en comportamiento animal estarán encantados de echarte una mano.
Fuentes
Carlstead, K., Brown, J. L., Strawn, W., 1993. Behavioural and physiological correlates of stress in laboratory cats. Applied Animal Behaviour Science 38, 143–158. Fatjó, J., 2010. Manejo del estrés agudo. Instituto de Veterinaria Aplicada