Los parásitos pueden causar varios problemas en la piel de los perros, algunos de ellos son:
- Picor: Las pulgas y garrapatas pueden causar una intensa picazón y rascado debido a la reacción alérgica a sus mordeduras. Esto puede causar irritación y enrojecimiento de la piel, y en casos graves, puede conducir a infecciones bacterianas secundarias.
- Sarpullido: Los ácaros y las lombrices pueden causar sarpullido y erupciones en la piel de los perros.
- Pérdida del pelo: Los parásitos pueden causar una pérdida del pelo en áreas afectadas de la piel, ya que el rascado y la picazón pueden dañar los folículos pilosos.
- Anemia: Los parásitos externos como las pulgas pueden causar una pérdida de sangre significativa, lo que puede conducir a una anemia en casos graves.
- Infecciones Bacterianas: Los parásitos pueden causar lesiones en la piel que son propensas a las infecciones bacterianas.
Es importante recordar que los problemas de piel causados por parásitos pueden ser evitados mediante una desparasitación regular y un cuidado adecuado del pelaje y ambiente del perro. Si sospechas que tu perro tiene problemas de piel causados por parásitos, es importante hablar con tu veterinario para recibir el tratamiento adecuado.
Síntomas de dermatitis atópica en perros
El primer síntoma de la atopía canina es el picor, más o menos intenso. Al principio aparece de forma estacional y como reacción a pólenes, pero acaba presentándose en cualquier época del año porque la reacción se extiende a lana, polvo, moho, plumas, etc. El perro se rascará la cara, las orejas o el pecho y se lamerá las patas. Cuanto más tiempo pase sin un correcto tratamiento para la dermatitis atópica en perros, más visibles y graves serán los signos clínicos. La dermatitis atópica suele presentarse en perros de 1-3 años de edad y parece que hay algunas razas con mayor predisposición, como el West highland white terrier, el caniche o el bulldog. Además del picor localizado en orejas y parte inferior del cuerpo, destacamos estos síntomas:
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Secreción nasal y ocular.
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Estornudos.
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Frotamiento de la cara.
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Lamidos en las patas que dejan unas manchas marrones en los pies.
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Heridas.
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Costras.
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Pérdida de pelo.
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Infecciones bacterianas secundarias.
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Seborrea seca o grasa.
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Abatimiento.
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Si no se trata, la piel se engrosa e hiperpigmenta.
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En ocasiones, puede desarrollarse una otitis con enrojecimiento, inflamación y secreción.
La desparasitación es una parte importante en el tratamiento y prevención de problemas de piel en perros. Los parásitos internos y externos, como las pulgas, garrapatas, ácaros y lombrices, pueden causar irritación, infección y alergias en la piel de tu perro. Esto puede llevar a problemas como picazón, enrojecimiento, sarpullido, caída del pelo, y, en casos graves, anemia y enfermedad general.
Una desparasitación regular con medicamentos específicos recomendados por tu veterinario, puede ayudar a evitar estos problemas de piel. Es importante seguir las instrucciones de tu veterinario en cuanto a cuándo administrar el medicamento y cual es el más adecuado para tu perro.
Además, también es importante mantener el entorno limpio y libre de parásitos, cepillando regularmente a tu perro y vaciando y limpiando su cama y zonas de descanso. También puedes considerar utilizar productos para el control de pulgas y garrapatas, como collar antiparasitario, sprays, o lociones.
En resumen, una desparasitación regular es clave para tratar y prevenir problemas de piel en perros. Si tu perro presenta problemas recurrentes de piel, es importante hablar con tu veterinario para determinar la causa subyacente y recibir tratamiento apropiado.
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