Lo primero que destaca del gato bosque de Noruega es su tamaño, pudiendo llegar hasta los 8 kg de peso, y su pelo largo y denso. Y si su aspecto es espectacular, también lo es su carácter. Sociable, cariñoso y juguetón, encaja perfectamente como gato de familia. Sigue leyendo y descubre las características del gato bosque de Noruega.
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Características físicas del gato bosque de Noruega
A pesar de su tamaño, no son gatos que transmitan una sensación de pesadez gracias a sus formas alargadas. Sí son de estructura ósea sólida. La cabeza tiene forma triangular y carece de stop. El cuello es ancho. Las orejas son bastante grandes. Tienen una base ancha y extremos puntiagudos. Las llevan erguidas y tienen penachos como los de los linces. Los ojos son grandes y de forma ovalada. Se disponen ligeramente oblicuos. Su mirada es atenta. Se admiten en todos los colores. Las patas son fuertes y largas. Las traseras son más altas que las delanteras. Los pies son grandes y redondeados.
El pelo es considerado semilargo, aunque varía su longitud según las estaciones. Además, tiene mayor longitud en la zona del cuello, formando un collar, y en las patas, a modo de calzones. Destaca por su brillo. Cuentan con subpelo de textura lanosa y lo encontramos en diferentes colores, como el negro, el azul, el crema o el blanco. La cola es larga y está bien provista de pelo. Entre los dedos también tienen pelo.
Carácter del gato bosque de Noruega
Los gatos de esta raza suelen mostrarse sociables, aunque más reservados con los desconocidos. Son tranquilos y cariñosos, para nada agresivos. Crean un fuerte vínculo con sus cuidadores. Todas estas cualidades contribuyen a que establezcan buenas relaciones con los más pequeños de la casa, con los que se muestran muy tolerantes. Además, son inteligentes y muy activos, con lo que ambos podrán disfrutar de buenas sesiones de juego.
Por los mismos motivos pueden convivir en el hogar con animales de otras especies. De hecho, son gatos a los que les gusta estar acompañados. Hay que tener en cuenta que su proceso de maduración es lento y transcurre a lo largo de varios años.
Cuidados del gato bosque de Noruega
Si queremos adoptar a un gato bosque de Noruega, debemos tener claro que un punto fundamental de atención es su manto. Requiere cuidados frecuentes para mantenerse en perfecto estado. Pero no solo por cuestiones estéticas, ya que los cepillados regulares ayudan a eliminar el pelo muerto, con lo que se evita una ingesta excesiva durante el autoacicalado. Así se previene la formación de bolas de pelo y los trastornos digestivos asociados. La alimentación de calidad, la actividad física y una correcta hidratación son aspectos que también contribuyen al buen tránsito intestinal.
Los profesionales de las Clínicas Veterinarias Mivet pueden asesorarte en este y cualquier otro aspecto relativo a la salud de tu bosque de Noruega. En cuanto al ámbito psicológico, son gatos que necesitan que se les dedique un tiempo a diario para el juego. Cualquier objeto o juguete les servirá. Por otra parte, hay que tener en cuenta su fuerza y su tamaño. Por ejemplo, si queremos ponerles un rascador vertical, tendrá que ser lo suficientemente sólido.
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