Los gatos son animales muy limpios: se lavan ellos solos, solo beben agua cristalina y entierran sus heces. Sin embargo, uno de los problemas de conducta más comunes es la eliminación inapropiada, es decir, que el gato orine o haga caca fuera del arenero. Si este es tu caso, seguro que te preguntas “¿por qué mi gato no usa el arenero?”. Descúbrelo en este artículo.
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Causas por las que tu gato hace caca o pipí fuera del arenero
Si tu gato no usa el arenero, no es porque sea sucio ni tampoco para llamar la atención. Este comportamiento nos indica que el felino tiene un problema. Estas son las principales causas:
- El arenero es inadecuado: cada gato tiene sus preferencias. Si la arena no le gusta, el arenero es demasiado pequeño o la localización es inadecuada, el gato busca un lugar mejor y hace caca fuera del arenero. También puede ser un problema de limpieza, es decir, la arena se cambia con poca frecuencia o el arenero está sucio.
- Sufre estrés o miedo: puede que haya asociado el arenero o su localización con una mala experiencia, por lo que tiene miedo. También puede sentirse despistado y ansioso por algún acontecimiento, como una mudanza o pasar demasiado tiempo solo.
- Marca su territorio: si comparte la casa con otros felinos, tu gato puede orinar fuera del arenero para marcar su territorio o su estatus social. Además, la presencia de otros gatos suele causar ansiedad y problemas de conducta.
- Está enfermo: defecar u orinar fuera del arenero es un síntoma de algunas enfermedades, como la cistitis, el fallo renal o la diabetes. En estos casos, el gato no usa el arenero porque siente mucha urgencia, o bien, porque lo ha hecho tantas veces que este ya está muy sucio.
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Qué hacer si tu gato no quiere usar el arenero
El tratamiento de la eliminación inapropiada depende de la causa. Si se debe a sus preferencias, tienes que descubrir qué tipo de sustrato le gusta, ponerle un arenero adecuado a su tamaño, cambiar la arena a diario y limpiar el arenero cada semana. También es muy importante colocar el arenero donde ahora suele hacer sus necesidades, o bien, en un lugar más íntimo y silencioso.
Para evitar el marcaje, se puede utilizar la castración u hormonas para reducir el estrés. También es recomendable separar bien el espacio de cada gato, los juguetes y los areneros. Lo más aconsejable es que haya siempre un arenero por cada gato más uno de sobra.
A pesar de estas recomendaciones, debes tener en cuenta que puede deberse a varias causas, algunas de ellas bastante graves. Por ello, si tu gato no usa el arenero, tienes que acudir a una clínica veterinaria para obtener un diagnóstico lo antes posible. En Clínicas Mivet contamos con expertos en comportamiento animal y técnicas de diagnóstico muy avanzadas. Busca tu clínica Mivet más próxima y te ayudaremos a solucionar el problema de tu felino.
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Fuentes:
Neilson, J. C. (2004). Feline house soiling: elimination and marking behaviors. Clinical techniques in small animal practice, 19(4), 216-224.