El perro lobo checoslovaco es un cruce de pastor alemán con el lobo euroasiático de los Cárpatos. Su origen fue un experimento que tuvo lugar en 1955, consiguiendo la mezcla perfecta entre el carácter de un perro y el instinto de un lobo. ¿Quieres conocerle? No te pierdas sus características y cuidados.
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Características físicas del perro lobo checoslovaco
Las características del perro lobo checoslovaco son muy similares a las de su pariente salvaje. Pesa más de 20 kg, con una altura superior a 60 cm. Se debe a un cuerpo muy potente, con el pecho largo, el lomo corto y el abdomen recogido. Descansa sobre unas patas rectas de muslos amplios y pies grandes. Le aportan un movimiento muy sigiloso, con la cola levantada en forma de hoz.
De su cuello, largo y musculoso, sale una cabeza en forma de cuña. Está formada por un cráneo grande y alargado, con la frente abultada, así como por un hocico corto, recto y algo estrecho. Sobresalen sus labios negros y apretados, así como la línea negra que rodea a sus ojos. Estos son pequeños, inclinados y de color ámbar. Se acompañan de unas orejas cortas, triangulares y erectas.
Finalmente, no podemos olvidar su pelo recto y grueso, acompañado de una densa lana interna. A diferencia de otras razas, cubre todo su cuerpo, incluyendo el abdomen, el escroto y la parte interna de los muslos, las orejas y los dedos. Siempre es de color gris amarillento o plateado, con la máscara más clara. Una excepción es el perro lobo checoslovaco negro, menos habitual.
Carácter del perro lobo checoslovaco
El perro lobo checoslovaco es tan inteligente, curioso e independiente como un lobo, algo positivo si se le entrena adecuadamente. Sin embargo, estas características le aportan un temperamento muy fuerte y un carácter bastante reactivo. También es territorial y desconfiado con los extraños.
Su lado más perruno es la gran fidelidad que muestra a su familia. Este perro necesita la presencia de un tutor experimentado y con conocimientos en educación canina, especialmente si convivirá con más perros porque tiende a ser territorial y dominante.
Cuidados del perro lobo checoslovaco
Si vas a adoptar un perro lobo checoslovaco, tendrás que invertir mucho tiempo en su educación. Es muy cabezota, así que debes ser paciente y utilizar refuerzos positivos. Además, este semilobo requiere mucho deporte diario, así como estimular su mente. Nunca juega solo, sino que necesita tener una motivación. Los juegos interactivos (recoger pelotas, deportes caninos, etc.) son fundamentales para su salud mental.
En cuanto a su alimentación, se recomienda una dieta BARF guiada por un veterinario. Es un animal muy limpio que solo necesita bañarse si está realmente sucio. Para mantener su pelo, es suficiente con un cepillado semanal, aunque debe ser diario durante las mudas. También es importante cepillar sus dientes y cortarle las uñas cuando crezcan demasiado.
Finalmente, debes estar atento a su salud. Esta raza tiene tendencia a sufrir enfermedades como displasias, degeneración nerviosa y problemas cardíacos. Aprovecha las vacunaciones obligatorias para hacerle una revisión veterinaria anual. Acude a tu clínica veterinaria Mivet más cercana y cuidaremos de la salud de tu perro lobo.
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Fuentes:
- Internationale, F. C. (1999). FCI-Standard Nº 332. Perro-Lobo Checoslovaco (Ceskolovenský Vlciak). Thuin, Belgique: Federation Cynologique Internationale (FCI).
- A.K.C. Czechoslovakian Vlcak Dog Breed. American Kennel Club. En akc.org