El mudi es un perro pastor y, aunque no sea uno de los más conocidos, su origen se remonta a los siglos XVIII y XIX en Hungría, pero en la actualidad es uno de los mejores perros de compañía por su fidelidad y su buen comportamiento en casa.
A continuación, vamos a explicarte todas las características y cuidados del mudi si estás pensando en adoptarlo o acabas de hacerlo.
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Características físicas del mudi
El mudi tiene las facciones características de un perro pastor con una cabeza en forma de cuña y las orejas acabadas en punta. Su musculatura no está desarrollada en exceso, aunque sí que es un perro ágil y fuerte que vive entre unos 12 y 14 años si le ofreces los cuidados necesarios para su raza.
Tiene los ojos de color oscuro y muestra un hocico bastante largo, terminado en una trufa negra. Las extremidades están bien proporcionadas en relación al cuerpo y la cola es larga de inserción media. Esta raza de perro suele medir entre unos 38 y 47 centímetros y pesa entre unos 8 y 13 kilos.
Por otro lado, tiene un pelo corto y liso en las extremidades y la cabeza, que se transforma en un manto algo más largo y ondulado en las otras partes del cuerpo. En cuanto a los colores, se aceptan los siguientes:
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Negro
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Azul mirlo
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Marrón
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Bayo
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Blanco
Carácter del mudi
Los perros mudi son altamente inteligentes y si los educas bien desde pequeños son capaces de acatar cualquier orden que les enseñes. Además, son perros tenaces con los que podrás ser insistente en su educación y no se cansarán de hacerte caso, ni se les desviará la atención de su objetivo.
Gracias a su carácter, estos perros todavía son utilizados para desarrollar tareas como detección de narcóticos, misiones policiales, guardia, etc. Como animales de compañía son perros muy fieles y afectivos con su familia, pero pueden mostrarse desconfiados con las personas desconocidas, a no ser que les enseñes desde bien pequeños a ser más confiados.
Cuidados del mudi
El primer cuidado que deberás tener con tu perro mudi es llevarlo al veterinario para que le haga la primera revisión y le administre las primeras vacunas relacionadas con sus primeros meses de edad. Desde entonces, deberás acudir a tu centro de confianza cada vez que detectes un comportamiento extraño en tu animal de compañía. En las Clínicas Veterinarias Mivet somos expertos en el cuidado de todo tipo de razas de perro y podemos asesorarte personalmente acerca de cuáles son todos los consejos que necesitas saber si convives con un perro mudi.
Por otro lado, son animales muy activos, por lo que necesitarán que les ejercites diariamente, aunque no sea a través de deportes excesivamente intensos. Además, son perros a los que les sienta muy bien ejercitarse a través del juego, ya que así ponen en marcha también su intelecto.
Es necesario cepillar a tu perro mudi con frecuencia para evitar que el pelo se le enrede y deberás revisarle la melena, las orejas, los ojos y las patas después de cada paseo para retirar toda la suciedad que hayan podido acumular y así evitar infecciones o parásitos.
Deberás bañar a tu ejemplar mudi únicamente cada tres meses o cuando realmente esté muy sucio y educarlo siempre mediante técnicas respetuosas, como el refuerzo positivo, desde pequeño para poder disfrutar de una buena convivencia en el hogar.
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