Terrier escocés o scottish terrier: características

La raza de perro terrier escocés (scottish terrier) existía ya en la Escocia del siglo XIX, cuando se fundó un club para su cría y selección. Su objetivo era obtener al perro más adecuado para la caza en madriguera. Así apareció este can paticorto, elegante y astuto. ¿Quieres saber más? Entonces, ¡sigue leyendo este artículo sobre las características del terrier escocés o scottish terrier!

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Características físicas del terrier escocés

La principal característica del terrier escocés son sus extremidades cortas y su cuerpo alargado, perfecto para la caza bajo tierra. Mide entre 25 y 28 cm de altura, con un peso de 8,5-10 kg. Está cubierto por un denso pelaje, que le protege de la intemperie y consta de dos capas. La capa interna es corta, densa y suave, mientras que la externa es dura y alambrada. Su color puede ser negro, trigo o atigrado, aunque existen ejemplares de terrier escocés blanco.

También destaca su cuello musculoso, que sujeta a una cabeza larga, aplanada y estrecha. Su cráneo y su hocico poseen una longitud casi idéntica. Éste es fuerte y profundo y cuenta con una nariz relativamente larga. Sobre él y bajo unas cejas bien pobladas, aparecen unos ojos castaños, almendrados y bastante separados. En conjunto, le dan una expresión viva y simpática. También colaboran sus orejas y cola erectas.

Carácter del scottish terrier

El scottish terrier posee una gran personalidad. Se trata de un animal muy enérgico, alegre e inteligente. Le encantan los retos y probar todo tipo de juegos. También posee un gran instinto de caza, algo con lo que debemos tener cuidado, ya que le gusta cavar y salir corriendo detrás de objetos que se mueven.

En casa, es un perro muy cariñoso y leal a sus familiares, aunque también es reservado y necesita sus momentos de independencia. Permanece tranquilo si está bien estimulado, pero se mantiene siempre alerta ante cualquier ruido, por lo que puede convertirse en un perro ladrador.

Cuidados del terrier escocés

El terrier escocés necesita una dieta de calidad y adaptada a su raza. Debemos controlar las tomas y premios, ya que la obesidad en esta raza paticorta es muy desaconsejable. Además, necesitan hacer bastante ejercicio. Aunque pueden adaptarse a vivir en un piso, tienen que salir a pasear varias veces al día y entretenerse mediante el juego. También podemos estimular su inteligencia con algún tipo de entrenamiento. 

En cuanto al cuidado de su pelo, esta raza es bastante especial. Tan solo necesita un cepillado semanal, pero es aconsejable cortarle el pelo cada 2 o 3 meses para evitar enredos. El baño tan solo se recomienda si es realmente necesario. 

Finalmente, debemos cuidar de su salud. Este perro tiene predisposición a sufrir algunas enfermedades, como la luxación patelar. Además, debido a la endogamia, pueden tener enfermedades genéticas, como la enfermedad de Von Willebrand. Por este motivo, si tienes o vas a acoger a un terrier escocés, debes acudir a revisiones veterinarias periódicas. Busca tu clínica Mivet más próxima y te informaremos sobre esta raza y sus cuidados. 

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Fuentes: 

• Internationale, F. C. (2011). FCI-Standard Nº 73. Scottish terrier. Thuin, Belgique: Federation Cynologique Internationale (FCI).

• A.K.C. Scottish terrier dog breed. American Kennel Club. En akc.org